Mami, quiero hacer alguna actividad después de la escuela

03 May Mami, quiero hacer alguna actividad después de la escuela

Estas actividades o clases que por lo general se toman por las tardes o fines de semana, son beneficiosas para el rendimiento físico e intelectual de los niños.

• Les ayudan a organizar su tiempo libre.
• Ayudan en su formación personal y académica.
• Les permiten desarrollar habilidades sociales y cognoscitivas que, por lo general, no se adquieren en el aula.
• Les permiten conocer nuevos ambientes y amiguitos.
• Les crean un hábito de estudio.
• Estimulan la sana competencia.
• Les evita que tengan comportamientos no adecuados cuando no están supervisados por un adulto.

Son muchos los beneficios de tomar estas clases extraescolares, pero no se debe sobrecargar a los estudiantes. La clave para elegir las actividades, cuántas y cuáles, radica en conocer las necesidades y capacidades individuales de cada niño dependiendo de su edad y carácter.

Diferentes actividades para cada niño

Estas actividades se clasifican en tres grandes ámbitos:

• Deportivas, que incluyen por ejemplo clases de karate, fútbol, natación, etc. Los deportes en general ayudan a expandir la capacidad de coordinación y la psicomotricidad y desarrollan en los niños valores, como la disciplina, el compañerismo, el respeto, el espíritu de equipo, la superación y la competitividad.

1. En grupo -fútbol o baloncesto-, recomendables para chicos con problemas de socialización o timidez, pues fomentan la relación con otros niños y aportan seguridad.
2. Individuales -artes marciales, tenis, natación-, son buenas para lo más hiperactivos o con cierta agresividad, puesto que les enseñan a dominar los impulsos y soltar la energía.

• De ocio como pueden ser aprender ajedrez, tejer, tarjetería, manualidades, danza, ballet, teatro, pintura o música trabajan la creatividad y la comunicación, fomentan la imaginación y las destrezas manuales y visuales. Los niños deben divertirse cuando las realizan y no considerarlas una obligación.

• Académicas, que pueden abarcar aprender un idioma extranjero, tomar clases de matemáticas o reforzar materias escolares. Las más solicitadas son idiomas, clases de computación o de matemáticas. Es recomendable que se les dé un carácter menos serio o académico para que los niños no las relacionen como una extensión del día de clases.

Cada una de estas actividades aportan diferentes beneficios a quienes las practican, pero al momento de elegirlas hay que valorar varios aspectos puesto que una elección inadecuada por parte de los progenitores puede provocar el efecto contrario en los niños y en lugar de sentirse a gusto termine aburriéndose, rechazando o abandonando la actividad.

Cómo elegir una actividad extraescolar

Antes de inscribir a su niño a cualquier actividad les recomendamos tomar en cuenta los siguientes puntos:

• Pregunte a su hijo lo que le gustaría hacer después de la escuela.
• Sugiérale que tome un clase de lo que ha elegido para saber si realmente le va a gustar.
• Considere la edad, gustos y habilidades del chico antes de elegirla. Por ejemplo, si a su niña le gusta bailar, puede sugerirle clases de flamenco o ballet, pero si no, tal vez prefiera inscribirla en una clase de arte.
• Antes de los 6 años, los psicólogos recomiendan clases que no exijan normas. Un pequeño de tres años seguramente no seguirá al pie de la letra las instrucciones para jugar ajedrez.
• Nunca utilice estas actividades para premiar o castigar al pequeño.
• Si ve que el niño tiene mucho sueño, está cansado o pone pretextos para no ir a las clases es probable que dicha actividad sea demasiado para él.
• El niño debe ir a estas actividades de manera voluntaria.

 

Referencia:

http://www.todobebe.com/articulos/las-actividades-extraescolares-1480

http://mi.todobebe.com/helena