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La adaptación de los niños en la escuela

La adaptación de los niños en la escuela

La llegada a la escuela es un período difícil en los niños. Por primera vez dejan a sus padres y se enfrentan solos a una nueva experiencia. Su adaptación requiere semanas y muchos cuidados. Incluso cuando sea sólo la transición de preescolar a primaria o de primaria a secundaria, es un fuerte cambio y se requiere de tiempo y paciencia.

A partir de los tres años al ir al colegio el niño da sus primeros pasos en la edad adulta. No es de extrañar que el primer día de escuela muchos niños lloren ya que supone una verdadera ruptura con sus costumbres y entorno, además le resulta extremadamente difícil la separación de la madre, de su casa y de sus hermanos. Ahora tendrá que aprender a vivir en sociedad con otros niños y adultos a quienes no conoce.

Consejos que van a ayudarles a usted y a su niño a poder hacer una buena transición a la escuela.

Trabajen en equipo: Si están decidiendo entre algunas escuelas, discuta las opciones con su niño y háblele de lo que cada escuela ofrece. Cuando llegue el tiempo para considerar detalles como el escoger clases, incluya a su niño.

Haga de la escuela algo divertido: Hable de la escuela como un lugar divertido donde el niño podrá aprender cosas nuevas y entablar amistad con personas nuevas y no como una obligación o un trabajo pesado.

Días antes: Antes de empezar la escuela, asegúrese que usted y su niño saben a dónde ir y qué hacer el primer día. Muéstreles dónde está la averiguar cuál aula será la suya, visite el aula antes para familiarizar a sus niños con la rutina de las mañanas. También puede llamar a la escuela para saber si hay algunos procedimientos especiales para el primer día.

Acompañe a su hijo: Aún si su niño va a la escuela primaria en autobús, puede ser que ustedes quieran ir juntos el primer día, especialmente si está nervioso. Pero si ellos prefieren ir solos en ese día importante, y esto no compromete su seguridad, entonces, complázcales.

Preséntelos: Los niños a menudo son tímidos con los maestros nuevos. Si usted lleva a su niño a la escuela el primer día, posiblemente sea buena idea ir al aula y presentar al niño con el maestro. Dígale al maestro acerca de los intereses especiales o desafíos que tiene el niño, y también dígale al maestro si el niño responde a algún otro nombre u otras indicaciones especiales.

Para los más pequeños: Deja que tu hijo lleve, se así lo desea, su juguete preferido, o algo que le sea familiar y le mantenga unido con su hogar.

Despedidas rápidas:  Evita prolongar las despedidas en exceso. Hay que transmitir seguridad al niño y evitar dramatismo. Tu hijo debe saber que dentro de un rato vendrás a recogerle y que lo que estás haciendo es lo mejor para él.

Contacto directo con profesores: Siempre que lo consideres necesario habla con la profesora o educadora sobre tus dudas, tus inquietudes y sobre cualquier cambio que observes en el niño.

Cada niño llega a la escuela con un grado de “madurez emocional y social”, cada niño tiene un ritmo de adaptación personal que hay que respetar, necesita “su” tiempo, tiempo que va en relación a la adaptación que también hacen los padres; todo lo que nosotros sentimos: la inseguridad, la culpabilidad por la separación, el temor a si va a ser bien cuidado…dificultará y alargará el periodo de adaptación. Y por otro lado también está en relación al modo en que se trabaje en la escuela, a su modelo pedagógico, si responde a las necesidades que en este periodo tiene el niño.

Al acudir a la escuela inicia la socialización escolar que le supone iniciarse en nuevos roles sociales, en nuevos hábitos… nuevos para ellos con respecto a los familiares.
 En la escuela el proceso socializador se da en dos direcciones, una vertical: la de las relaciones educador-niño y otra horizontal: la relación entre iguales.

Las primeras son similares a las que el niño vive en casa con sus padres, el adulto tiene la autoridad, pero en el caso de la escuela el educador es un profesional y puede ser otro modelo para el niño y, en algunos aspectos, jugar un papel muy importante como generador de salud. Las segundas son informales, espontáneas y ofrecen unas posibilidades de relación social cualitativamente distintas a las que tiene el niño en su casa, aunque tenga hermanos; los compañeros son también “ventanas” al mundo, “representantes” de otras culturas.

Por último, los padres deben estar preparados para el rechazo los primeros días y no desesperarse por esto, es normal que el niño tenga su periodo de adaptación y que los primeros días extrañe a sus antiguos compañeros, maestras y su escuela. Conforme pasen los días el niño hará nuevas amistades y se adaptará al nuevo centro educativo.

 

 

 

 

 

 

 

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