09 Ene Juego de roles y sus beneficios
A esta dinámica se le llama juego de roles, es decir, representar un papel que no es el nuestro: papá y mamá, doctor, bombero, policía…
Cuando juegan al papá y la mamá, cada uno desempeña su papel conforme lo ven en su casa: la niña toma a los bebés y se acerca a atenderlos, les da de comer, los cambia; el papá sale a trabajar, llega a jugar con los niños.
Aunque muchas veces es criticada esta actividad porque podría dar lugar a conductas negativas, es lo ven en su vida cotidiana. Incluso cuando el papá levanta la voz o la mamá golpea a sus pequeños; es por eso que debemos siempre tener cuidado de lo que nuestros pequeños ven y escuchan, para no repetir patrones.
También en esta dinámica las niñas llegarán a representar a mamá cuando sale a trabajar, toma la computadora o se pone su atuendo de doctora o maestra; a su vez, los niños se quedarán en casa como el papá que cuida a los hijos. Los roles que representen los pequeños serán los lugares que ocupemos dentro de la sociedad moderna.
Pero como todo, debemos tomar las cosas buenas de la vida y utilizar el juego de roles como herramienta de aprendizaje.
Hace unos días observaba el juego de mis sobrinos y mi pequeña, con una cocinita equipada con trastes, cucharitas e instrumentos necesarios para representar lo que hacemos realmente en la cocina.
Mientras cada uno tomaba su papel de “yo cocino, tú sirves en el plato”, una de mis sobrinas le dice al niño: “Tú siéntate que te vamos a servir”. Ahí es en donde entra mi instinto defensor de que las cosas en pareja deben ser “parejas”, pero ese es otro tema. Regresando al papel de los roles, cómo desde niños determinamos el rol que realizaremos de “grandes”, donde cada quien determina el papel que jugará dentro de la sociedad. El que quiere ser bombero y ayudar a la gente pide de regalo un casco y su enorme carro de bomberos; al comenzar el juego, representan una historia donde existe una víctima y el valeroso bombero tiene que rescatarla. En ese momento dirá: “Me toca ser el bombero o ahora yo seré el policía que te ayude”.
Sin saber, por medio de estos juegos existen muchos beneficios al utilizar la representación, porque ayudan a:
- Desarrollar su imaginación.
- Cultivan su lenguaje, al salirse del vocabulario que utilizan coloquialmente.
- Se enfrentan a diversos puntos de vista, muchas veces al defender el suyo mientras negocian que sea utilizado.
- Por lo regular se genera un líder, pues son los que organizan el juego (“tú vas a ser el bombero, yo seré el policía”.
- Interpretan distintas personalidades, pueden dejar de ser ellos y actuar de una forma que jamás harían en la rutina.
- Desarrollan su independencia, porque logran manejar situaciones imaginarias.
- Propicia la socialización al interactuar con otros niños, incluso integrantes de su familia (“¿abuelito, jugamos a que yo te curo?”).
- Ante diversas circunstancias dentro de su juego, aprenden a improvisar y aportan soluciones a problemas que se les presentan.
- Aprenden a cooperar y a trabajar en grupo.
Estos pueden ser solo algunos de los beneficios que obtienen nuestros pequeños al representar roles dentro del juego. Es por eso que dentro de la pedagogía es una herramienta muy utilizada para enseñar diversos temas dentro del aula. Es un método básico dentro del ámbito escolar y que se llega a utilizar en todo momento. Sobre todo porque es fácil de manejar temas específicos por medio del juego y, al ser ellos los que llevan la clase, se obtienen aprendizajes más significativos.
Así que, cuando veas jugar a tus pequeños, ¡intégrate! Conocerás como es su conducta respecto a los roles que representan y además te divertirás junto con ellos.
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