Consejos de seguridad sobre los juguetes del bebé

30 Abr Consejos de seguridad sobre los juguetes del bebé

Solo un padre sabe exactamente qué juguetes son más apropiados su hijo. Aunque hay niveles en dependencia de las edades, las conductas de aprendizaje de los niños y sus estilos son muy individuales y nos corresponde entonces escoger qué les daremos para jugar mientras van creciendo.

Consejos de seguridad sobre los juguetes del bebé para que puedas aplicarlo en el caso de tu pequeño. Los juguetes son lo más preciado de la niñez, siempre y cuando se elijan con cuidado. Pero ¿son algunos juguetes peligrosos?

Juguetes apropiados para cada edad:

La mayoría de los juguetes tienen una edad recomendada que aparece en la caja del fabricante. Es una buena pauta para comprar juguetes seguros para niños; sin embargo, ten en cuenta las capacidades reales de tu hijo a la hora de tomar una decisión. Los bebés desarrollan a distintas edades y lo que es bueno para uno de 1 año quizás no lo sea tanto para otro de la misma edad.

•  Busca juguetes que estén bien ensamblados. Asegúrate de que las colas estén bien cosidas, las costuras de los animales de peluche estén reforzadas y la pintura no se esté saliendo. Los animales de peluche tampoco deberían tener botones, hilos, cintas, ni cualquier otra cosa que el niño pudiera arrancar y llevarse a su boca.
• ¿Está tu niño físicamente preparado para este juguete? Por ejemplo, puede ser que los padres de niños más grandecitos le compren a su hijo una bicicleta de tamaño más grande para no tener que comprarle una nueva el próximo año. Esta táctica puede ocasionar lesiones graves si el niño no tiene suficiente habilidad física como para maniobrar la bicicleta más grande.

• ¿Está el juguete en buenas condiciones? Los juguetes usados que provengan de parientes o hermanos mayores o que se hayan adquirido en ventas de garaje pueden estar gastados o en malas condiciones, lo cual en algunas ocasiones puede ser peligroso. Revisa los botones, las pilas, las cintas, los ojos, las bolitas y los agregados de plástico de todos los juguetes nuevos o usados que puedan fácilmente romperse y salirse o que tu pequeño pueda llevarse a la boca con facilidad.
•  Piensa a lo grande. Hasta que tu niño cumpla los 3 años, las piezas de los juguetes deberían ser más grandes que su boca para evitar la posibilidad de que se ahogue. Para averiguar si un determinado juguete presenta peligro de producir ahogo, trata de hacerlo pasar por un rollo de papel higiénico. Si un juguete o alguna de sus piezas entra por el cilindro de un rollo, quiere decir que no es seguro.

Compra de juguetes:

Además de tener en cuenta la edad y habilidades de tu hijo, asegúrate de que sean juguetes de bordes lisos, sin puntas afiladas o puntiagudas. Si el juguete se desarma en piezas, es preferible que sean grandes, fuertes, que el bebé las pueda tocar cómodamente y poner en el suelo. También hay que revisar que no haya piezas pequeñas que el chiquilín pueda tragarse.
Limpieza de juguetes del bebé:

Inevitablemente los bebés ponen sus juguetes en la boca, de manera que es necesario mantenerlos higiénicos, junto al sitio donde juegan. Un peluche que cae al suelo recoge pelusas, polvo, partículas de alimentos o pelos de animales. Los juguetes deben ser periódicamente lavados con soluciones seguras para niños, que se compran en la tienda o se preparan en casa.

Juguetes de goma:

Los bebés y niños pequeños tienden a morder los juguetes durante la dentición. Por esto, dichos objetos deben ser preferentemente de goma, mas asegúrate de que están hechos de materiales no tóxicos. Ningún juguete infantil debe tener pintura que contenga plomo. Por otra parte, el juguete no debe desprenderse en piezas que queden en la boca y puedan ser tragadas. Escoge libros de goma antes que los de papel, pues no hay forma de que puedan arrancarle pedazos y mascarlos.

Área de jugar:

Mantén recogida el área de juego de tu pequeño, de ese modo evitas que tropiece y pueda caerse. Los libros de goma regados por el suelo provocan fácilmente que el bebé se resbale. Crea un lugar seguro para guardar los juguetes una vez se acabe el juego. Si pones un estante, es preferible que no sea alto, que el bebé alcance a coger sus cosas. Además, las cajas no deben cerrarse de golpe, para evitar que los deditos queden atrapados.

Los juguetes son muy importantes para el desarrollo físico, intelectual y emocional de los bebés. Pero es requisito imprescindible mantener su seguridad para que no se produzcan accidentes indeseados.

Los padres son responsables de que ningún juguete le haga daño a su hijo eligiendo aquellos que cumplan con los requisitos de la edad, con las características de su pequeño y que tengan una forma confiable.

¡Cuidemos de nuestros bebés!